Glomo Parque Patricios Quema

Resumiendo, tratando.
A las 12 del mediodía Parque Patricios desplegaba hormonas de alegría en cada rincón.
Ese solcito de invierno, la gente por las avenidas gigantes, caminar pausado, banderas ….la sensación era como ..ese relax de los días de acto o festejo en la primaria, en que todos los niños sabíamos que éramos libres del presente.
Es como extensión de mi barrio, por una simple empatía sureña..
Llego a la esquina del estadio, auriculares con L.Cohen, por eso de subrayar sensaciones con acordes, bondiola con los chicos.
Todos , felices, coca cola, mates, viceroy..y demases.

Ya fue raro.
La imagen es: la cancha, verde, vacía. Una pantalla grande, al fondo del pasto. Y toda la mitad de las butacas y la popular, llena de gente vivando a la imagen teletransmitida.
Debo aclarar que si es raro putear a un árbitro en tv, es más raro escuchar lo mismo hacia una cancha vacía, con una pantalla al fondo.

Todo iba normal,
Empieza a llover, bueno…
Graniza! Partido se suspende..grandísimas bolitas de hielo!
Salir, resignación pausada.
Se reanuda el partido! Adentro!

Lo que viene es difícil de objetivizar en el relato. Ya se sabe. No soy panelista deportiva ni mucho menos. Y probablemente sea la primera vez que salí así, de un lugar, digo de una cancha. (digo con esa sensación de abandono..)

La cuestión es, la sensación de uno, sumada a la sensación de miles, sumada a …parque patricios pasó a ser el barrio más triste de la capital.
La alegría robada en el cielo nublado, del julio lluvioso.
Ya no había sol, el festejo preparado por las manzanas de casas bajas…se veía anulado, trucado por caras de nada en mesas de nada.

Y que mas…
Con lo que me quedo, rarito, visto ahí al ras del ojo.
Fue el momento del gol de Vélez, la gente…ufff…la gente, toda esa gente reunida allí, se calló, se cayó. Silencio. Susurros.
Lágrimas.
Y niños llorando.





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